Los llamados frutos rojos o frutos del bosque constituyen un alimento muy importante para que los incorporemos en nuestra dieta diaria. Estos deliciosos frutos están compuestos en su mayoría por una gran cantidad de vitaminas, minerales y son excelentes antioxidantes para el buen funcionamiento del organismo.
Estos frutos del bosque los podemos incluir en una infinidad de preparaciones y como afortunadamente existe una gran variedad para elegir resultan recomendables como guarnición de carnes, ensaladas, postres, salsas y batidos. Una de las más utilizadas son las grosellas, blancas, negras o rojas que son ideales para decorar postres, realizar confituras y saborizar bizcochos.
El grupo de “frutas finas” -denominación que se vincula al aspecto comercial y no al botánico- incluye a un conjunto de especies que se caracterizan por su reducido tamaño y pueden clasificarse en dos subgrupos:
Berries, de sabores acidulados y rápida perecibilidad:
- Arándano o blueberry (Vaccinium corymbosum).
- Frambuesa roja o raspberry (Rubus idaeus).
- Moras y Zarzamoras arbustivas1 (híbridos del género Rubus)
- Grosellas o gooseberry: Grosella Espinosa o Uva Espina (Ribes grossularia), Grosella Negra o Cassis (Ribes nigrum) y Grosella Roja o Corinto o Zarzaparrilla (Ribes rubrum).
- Frutilla o strawberry (Fragaria ananassa e híbridos).
Cherries, frutos menores de las frutas de carozo:
- Cereza (Prunus avium)- Guinda (Prunus cerasus)
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